Cat Cafe Manager

Sinopsis & Ficha Técnica

¡Has llegado a Caterwaul Way! Veo que has heredado la vieja cafetería gatuna. ¡Tendrás que reconstruirla si quieres dar un hogar a los pobres gatos callejeros! Pero cuidado: hay verdaderos misterios gatunos en el pueblo, y un gato negro vagando por las calles

Tráiler

Reseña

¡Este indie nos ha dado más de una alegría! Llegamos a Caterwaul Way, una pequeña ciudad donde nuestra abuela nos ha dejado en herencia una destartalada cafetería, en la que daba cobijo a gatos callejeros. El pueblo parece tener una conexión con los felinos, relacionada con misterios y santuarios, que iremos desgranando poco a poco.

Empezaremos dándole nombre al local y creando nuestro personaje. ¡En las imágenes puedes ver como ha quedado nuestro Mochi Cat Café! Poco a poco, iremos añadiendo nuevos muebles, objetos decorativos, personal, recetas y lo más importante… ¡gatos!

Los michis asomarán la patita si llenamos el cuenco de la entrada; cada cebo atraerá a gatos diferentes, y después de ganarnos su confianza, podremos adoptarlos en el Cat Café, ¡incluso hay mininos especiales súper bonitos! (una vez llevemos el juego bastante avanzado, eso sí). El objetivo es buscarles un hogar definitivo, así que nosotros solo seremos un puente, hasta que el gatito encuentre a su humano ideal.

Además, los peluditos tienen habilidades especiales y afinidad con uno o más tipos de clientes, resultando un auténtico reclamo. Estar atento a estos aspectos y saber aprovecharlos nos permitirá sacarle mayor beneficio a las visitas.

Hay varios personajes que se encargan de conducir la trama del juego, que está bastante bien llevada a pesar de ser sencilla. Cada uno, con su peculiar personalidad, se convertirá en cliente habitual, y si los invitamos asiduamente a la cafetería y subimos nuestros niveles de amistad con ellos, podremos conseguir objetos especiales, mientras les acompañamos en sus intrigas diarias y les damos consejos.

Siguiendo el esquema tradicional de un juego de gestión, la base consiste en ir cumpliendo las comandas de los clientes mientras vamos haciendo que todo coja rumbo, mejorando poco a poco cada aspecto de la cafetería para que los visitantes se sientan cada vez más a gusto.

Los recursos que ganamos han sido de las cosas que más nos han gustado: Prescinden del dinero como tal, pues cada tipo de cliente “paga” con una moneda diferente, desde néctar hasta pescado o tela. Esos recursos podremos intercambiarlos en las tiendas del pueblo por distintos elementos, ya sean ingredientes para nuestras recetas, mobiliario o accesorios para los mininos. Por tanto, tendremos que mantener un equilibrio entre los clientes que nos visitan, o por el contrario, darle un empujón a ese recurso que nos hace mucha falta, solicitando que solo nos visiten trotamundos, brujas, punkis, empresarios, pescadores o artistas. Esta mecánica resulta de lo más útil a la hora de llevar el negocio, porque nos permite acotar al máximo lo que necesitamos.

Otro de los aspectos más chulos es que podremos elegir un tema dominante en la decoración de la cafetería y amueblarla en consecuencia: Restaurante americano, Bar de montaña, salón de té, fantasía… ¡Da rienda suelta a tu imaginación! Como ves, nuestro Mochi Cat Café ha resultado una mezcla entre salón de té y bosque encantado.

Y ya para terminar está el santuario, que funciona como un árbol de habilidades, en el que iremos desbloqueando distintas mejoras que harán nuestra vida mucho más fácil en la cafetería. Podremos elegir un objetivo cada vez de entre los disponibles, y cumplirlo nos desbloqueará una jugosa recompensa. Una vez más, saber elegir el objetivo ideal en cada momento es crucial para llevar a buen puerto nuestro Cat Café.  

A nivel técnico se podría pulir un poquito más (colisiones, terminaciones de objetos etc) pero la verdad es que no empaña la experiencia, siempre que sepamos lo que vamos a encontrarnos. Hemos disfrutado del título en Switch y en PC, y la verdad es que recomendamos este último, por dos motivos: Primero porque ya tenéis disponible la “Comfy Update” en Steam, que mejora mucho la experiencia, y porque el rendimiento es bastante mejor. Aun así, se puede jugar también en la portátil de Nintendo.

¿Habéis estado alguna vez en un Cat Café? Nosotros visitamos uno en Tokio, ¡fue muy divertido! Podéis leer nuestra experiencia aquí.

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