Sinopsis & Ficha Técnica
En Moonlighter, durante una excavación arqueológica se descubrió un conjunto de portales. La gente no tardó en darse cuenta de que esos pasadizos ancestrales conectaban con distintas dimensiones y reinos en los que los valientes e intrépidos aventureros podían encontrar majestuosos tesoros. Cerca del lugar de la excavación se fundó una pequeña aldea de comerciantes llamada Rynoka en la que los aventureros podían descansar y vender sus preciadas mercancías.
Descubre la rutina diaria de Will, un comerciante aventurero que sueña con convertirse en un héroe.
- Año: 2018
- Género: RPG / Roguelite
- Jugadores: 1
- Desarrollo: Digital Sun Games
- Idioma: Textos Español
- Duración: A partir de 15 horas
- Plataformas: Nintendo Switch / PS4 / PC / Xbox One
- Jugado en: PC
Tráiler
Reseña
Moonlighter es de esos juegos que, sin muchas pretensiones, consiguen una fórmula efectiva y que atrae al jugador. Desarrollado por un estudio español, Digital Sun Games, consiguió financiarse en Kickstarter apenas en un par de días, superando con creces su objetivo.
La premisa es sencilla: seremos comerciantes de día, y héroes de noche. Nuestra misión será saquear las mazmorras de madrugada, y encontrar en ellas el mayor número de objetos para vender en nuestra modesta tienda al alba. El resultado es una aventura llena de mazmorreo, trapicheos y enemigos, tremendamente disfrutable dentro del panorama independiente actual.
Su estética resulta muy llamativa, pixel art muy colorista y acogedor, con el que nos sentiremos a gusto desde nuestro primer minuto de juego, pues este estilo RPG con elementos roguelite le viene como anillo al dedo a Moonlighter. Durante todo el título nos acompañará un sentimiento de familiaridad muy agradable, tal vez por lo maravillosamente bien llevado que está su concepto.
La primera de las bondades de este título es que tendremos cierto control sobre la villa. Podremos invitar a nuevos comerciantes a compartir con nosotros su espacio en Rynoka, estableceremos los precios de los productos, y la clientela nos mostrará a través de sus reacciones si lo consideran una ganga, un buen precio, o demasiado caro. Según ese baremo, podremos hacer futuras incursiones optimizando el espacio de nuestro inventario, que es limitado durante todo el juego.
También podremos ir mejorando nuestra tienda poco a poco, por supuesto a costa de grandes inversiones, además de añadirle objetos que mejorarán nuestras estadísticas, como reducir el número de ladrones, aumentar la propina o establecer una jornada de trabajo más larga.
El entresijo de la venta es más profundo de lo que parece. Los productos tendrán una popularidad determinada, encontrándose al alza o a la baja, dependiendo de la frecuencia con la que los llevemos a la tienda. Por tanto, pensar en hacerse ricos a costa de la primera mazmorra supone un fallo garrafal. Lo ideal es ir avanzando a medida que el título nos lo va pidiendo, para llevar todos sus aspectos lo más compensados posible.
Llegado el momento, los temerosos pueblerinos también nos pedirán encargos que tendremos que cumplir si queremos obtener una suculenta suma. Por otro lado, tendremos varios tipos de clientes: Aquellos a los que les atraen las armas, otros que prefieren los libros, documentos y manuscritos, unos pocos estirados ricachones que pondrán en su punto de mira nuestro objeto más valioso, y los ladrones, a los que podremos espantar con una buena tunda, siempre que lleguemos a tiempo. Son muchos aspectos a tener en cuenta durante el periodo de tiempo en el que la tienda permanece abierta, os aseguramos que no os faltará trabajo.
Mientras amasamos nuestra fortuna, tendremos que ir saqueando la Mazmorra Gólem, la Mazmorra Forestal, la Mazmorra Desértica y la Mazmorra Tecnológica respectivamente, donde nos encontraremos un buen número de enemigos y criaturas peligrosas. Para enfrentarnos a ellos tenemos un pequeño arsenal de armas (Espada, lanza, arco o guanteletes) y una armadura que nos iremos equipando cuando consigamos los objetos necesarios, y que potenciará nuestros números en favor de los de nuestros oponentes.
La variedad de enemigos es otro de los puntos positivos de Moonlighter, pues a pesar de que algunos solo añaden características elementales, la mayoría son nuevos y diferentes en cada mazmorra, y nos otorgarán objetos de lo más variopinto.
Por su parte, la distribución de las mazmorras también tiene su aquel. Se desarrollan de manera procedural, de manera que nuestra próxima visita nunca será igual que la anterior. Las salas se distribuirán siempre de diferente forma, pero lo que si mantendremos es un esquema de 3 niveles antes de llegar al Jefe Final de la Mazmorra, que nos derrotará sin remedio si no vamos bien equipados. ¿Cómo mejorar nuestro equipamiento? Además de consiguiendo los objetos necesarios para fabricar las diferentes armas y armaduras , tendremos la opción de añadirles encantamientos, lo que aumentará considerablemente nuestras posibilidades de vencer.
Para lograr hacernos con un buen colchón de dinero, Moonlighter nos permite realizar saqueos y volver a la villa con nuestro botín, siempre y cuando no caigamos en manos de un enemigo. Si hacemos uso de determinados objetos, se abrirá un portal que nos transportará a casa, con nuestros tesoros a salvo listos para ser vendidos. Si por el contrario un monstruo nos derrota, iremos derechitos a casa con las manos vacías. Este concepto tiene una estrecha relación con lo que comentábamos del inventario. Tendremos que optimizar lo que recojamos, de manera que nos vayamos con el botín más próspero a tiempo, antes de arriesgarnos demasiado y perderlo todo, lo que nos dejaría durante el día sin nada que vender en nuestro comercio. Una retirada a tiempo puede suponer que volvamos a casa con menos ganancias de las esperadas, pero mejor eso que nos vapulee un nuevo y difícil enemigo por querer alargar nuestra incursión más de la cuenta.
Nuestro inventario constará siempre de 20 espacios, ni uno más ni uno menos. Contando con llevar un arma extra además de las dos equipadas, y 5 viales de vida, eso nos deja con 18 huecos disponibles. (Si morimos, se quedará con nosotros lo que tengamos en la parte superior del inventario, como sucede en The Flame in The Flood, lo demás lo perderemos). Con esto queremos decir que, por si no tuviéramos bastantes preocupaciones en las mazmorras, tendremos que ir eligiendo qué objetos sacrificar para hacerle sitio a los nuevos, con la creencia de que lo que hemos encontrado más adelante tendrá más valor. Para complicar aún más las cosas, muchos de los objetos que recojamos tendrán condiciones especiales y maldiciones: Tendremos que colocarlos obligatoriamente a la derecha, izquierda, arriba o debajo en la mochila, otros enviarán el objeto adyacente a la tienda de forma segura, otros se destruirán si recibimos demasiados golpes… Por tanto, no os extrañéis si pasáis tanto tiempo organizando el inventario como dándole felpa a los enemigos, porque su microgestión es una delicia.
Como veis, ambos conceptos (el mazmorreo y la venta) están intrínsecamente relacionados durante todo el desarrollo de Moonlighter. No podremos hacer lo uno sin lo otro. Además, pronto aprenderemos a reconocer los diferentes skins de enemigos y compradores, y sabremos qué esperar de antemano de ellos.
Otro de sus puntos fuertes es la banda sonora. Cada mazmorra tiene una melodía muy marcada, y todas ellas resultan amenas y agradables, unos tonos sencillos que enseguida empezaremos a tararear. Moonlighter también se sube a la ola de los juegos con dificultad elevada por defecto, como hemos comentado últimamente en Darkest Dungeon o Frostpunk. Por suerte para todo tipo de jugadores, cuenta con un selector con 3 niveles, para que escojamos el que más cómodo nos resulte a la hora de afrontar la aventura.
Si acaso tuviéramos que achacarle algo a este estupendo título, es lo precipitado de su final y lo poco profundo de su trama. Una vez tenemos la equipación a tope prácticamente hacemos la cuarta mazmorra y la final de manera seguida, pues no hay más opciones de aumentar nuestras estadísticas. La historia que se nos presenta en este punto es ocurrente, pero no deja de ser anecdótica, una excusa. Se desarrolla quizás de manera demasiado rápida, y nos encontramos ante los créditos casi sin darnos cuenta.
Por otro lado, es lógico que un título con estas características, viniendo de un estudio indie, presente algún que otro bug. Sabemos que el equipo de desarrollo trabaja continuamente para solucionarlo, puesto que cada poco tiempo cuelgan nuevas updates. Aun asi, Moonlighter cuenta a día de hoy con un par de errores que pueden echar a perder nuestra última incursión y unos cuantos miles de monedas. Recomendamos revisar la última actualización antes de instalar, para tener cuidado con lo que nos pueda suceder. De todos modos, son fallos puntuales que pueden arreglarse invirtiendo un poco más de tiempo, ya que cuando nos demos cuenta de que nos sucede, basta con no realizar esa acción.
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